Nuestra sociedad, tan violenta, difìcil y desesperada necesita mujeres valientes,generosas, con experiencia en causas comunitarias.
La mujer no està màs arriba ni màs abajo del hombre, sino a su lado.
Nos ha costado tiempo, paciencia y energìa alcanzar esta importante posiciòn.
No fue fàcil, pero aquì estamos ahora,perfectamente integradas.
Nosotras, las mujeres somos una fuerza de la naturaleza.Podemos alcanzar logros que, para el hombre, son imposibles.
Poseemos la sensibilidad, la determinaciòn,y el coraje que nos viene de nuestra condiciòn de esposas y madres y por lo tanto, nos impacientamos esperando que el mundo cambie, e intentamos cambiarlo nosotras.
Como mujeres y esposas de rotarios, debemos influir en aspectos de la sociedad: la recuperaciòn de la dignidad de la mujer y el destino de
la familia, los hijos,y consecuentemente de la comunidad.
Debemos recuperar el sentido de la valentìa, de la lealtad, del honor, de los valores espirituales que, como madres, debemos inculcar en nuestros hijos y como voluntarias, en nuestros semejantes.
Debemos y podemos preparar a las nuevas generaciones que quieren y deben conformar el destino del nuevo siglo.
Es un desafìo que requiere toda nuestra determinaciòn.
Debemos afianzar y hacer crecer nuestro servicio voluntario, ayudando e inspirando a nuestros esposos rotarios a que realicen obras en bien del crecimiento de la comunidad.
Luchemos por un mundo mas justo, avanzando por la senda del amor.
Comparto con ustedes una poesìa Què es la caridad?
Es silencio cuando nuestras palabras podrìan herir.
Es paciencia cuando nuestro pròjimo es intolerante
Es oìdos sordos cuando un escàndalo se ventila.
Es preocupaciòn por la aflicciòn del pròjimo.
Es buena disposiciòn cuando el deber llama.
Es entereza cuando el infortunio se presenta.
MUY FELIZ DÌA
Extraido de un discurso de Rossana Ravizza a las esposas de los rotarios
04-09-1998
Rosita